Hace unas dos semanas fui a una conferencia del Dr.
Patch Adams…
Cuando llegué y anunciaron que él iba a salir para
presentarse, tenía el corazón a millón. Estaba nerviosa. Uno de mis héroes de
toda la vida iba a estar a pasos de mí (literalmente, ya que estaba en la
primera fila). No hizo más que salir y con solo su vestimenta me dio tanta risa
que los nervios desaparecieron instantáneamente. ¿Qué
tenía puesto? Llevaba puesto un pantalón estilo bombacho de Aladino con un
estampado colorido, una camisa de botones con un estampado diferente al pantalón,
una corbata que no combinaba, su pelo largo lo tenía pintado verticalmente,
mitad azul y la otra mitad lucía sus canas naturales, y lo tenía largo a nivel
de la cintura. Además, llevaba puestos sus conocidos espejuelos rojos (jijijii.
El solo hecho de describirlo me trae nuevamente la sonrisa que rápidamente se
convierte en risa). Definitivamente, el payaso más bonito y real que he visto
en mi vida.
Entre una canción que el comenzó a cantar y los
aplausos de la gente de repente todos en el salón estábamos riéndonos a
carcajadas. Así, dio comienzo a su charla titulada “Humor and Health” (Salud y
Humor, en español).
A lo largo de su charla discutió parte de su trayecto
de vida que es, en definitiva, muy interesante y admirable. Lo primero es que
cuando era adolescente llegó a estar hospitalizado en instituciones psiquiátricas
por depresión. Describe como se sentía diferente y como contemplaba la muerte
como una salida de la ‘miseria’ que estaba viviendo; su papá era alcohólico y
se tornaba violento. Los psiquiátricas la única opción que le daban era los
medicamentos; pero el no creía en ellos. Estuvo así un tiempo hasta que un día
se levantٌó de la cama y dijo: “ya no más; yo voy a salir de esto”. Cuenta que
desde ese momento jamás ha vuelto a estar enfermo.
Y fue así que comenzó su interés por la medicina. En
esos momentos, en su inocencia de adolescente pensó que los únicos que tenían poder
para cambiar la sociedad y traer bienestar a los demás eran los médicos.
Mientras terminaba la escuela superior y se graduaba
de la Universidad, cuenta que empezó a estudiar a la gente. Su meta era lograr
establecer contacto con gente extraña y mantenerlo el mayor tiempo posible. Por
eso, comenzó a hacer sus experimentos cogiendo la guía telefónica y llamando a
desconocidos e intentaba tener conversaciones amigables con ellos. La idea era
que Patch decía cosas graciosas para mantenerlos en el teléfono la mayor
cantidad de tiempo posible (a todo esto era casi imposible contener la risa por
como lo contaba y sus anécdotas). Desde entonces se dio cuenta que cuando
conectas con la gente desde la risa y el humor algo pasa… la gente se vuelve más
amigable y termina estableciendo contacto por más tiempo. Es por esto que él
dice que lo que realmente nos mantiene saludables es la amistad. Llegó a decir:
“si tienes aunque sea un amigo y comida;
no tienes de que preocuparte, todo está bien”.
